martes, 1 de diciembre de 2015

Con la moral por los suelos, pero vuelo ⌛ ✞Ø

Ø

La última vez que contemple su angelical rostro fue el domingo, desde entonces no he vuelto a saber de él, conjeturo con que él estará curando sus heridas, mientras el reloj de arena me muestra que extraño pasa el tiempo sin saber de él.
Esta noche mientras me encontraba entre este mundo y aquel en el cual te envuelven los psicotrópicos oía su voz, exactamente igual que cuando estoy apunto de quedarme dormida, sólo puedo pensar en lo que le hecho de menos, vuelvo a ponerme su colonia, rocío el oso que él me dio para disponerme a tenerlo entre mis brazos toda la noche oyendo su olor, lo hundo en mi nariz..... Dios vuelve ya, es lo único que tengo en mente.
Me vienen imágenes constantemente a la cabeza, su sonrisa, su maldita sonrisa; él sonriendo, con esos hoyuelos que se le marcan de forma tan irresistible, su sonrisa es como una ducha fría en el infierno*
A veces sin previo aviso me viene un recuerdo de su olor, es tan real, parece que lo tuviera detrás mismo... en ese momento no puedo evitar cerrar los ojos, suspirar y visualizar ese insuperable rostro.

Me siento tan extraña sin tener ningún tipo de contacto con él, porqué estábamos conectados de una forma que trascendía más allá de lo corporal, era algo misterioso, como místico, estar con él era como sentir una energía, algo que me daba fuerza, no se es extraño de definir, porque era como el sol.  Me aportaba calor y me trasmitía una felicidad indefinible; y ahora que hay este abismo entre nosotros ya no soy capaz de notar su energía y siento como poco a poco me noto como más pesada, me sigue doliendo el pecho, y hay ratos que se me hace tan pesado respirar, no sabría definiros todo lo que el me transmite porque es algo que sólo se puede sentir


Tu gravedad me atrae, es por eso que caigo

Recycled J- Final Round

Que la fuerza de la Luna esté con vosotros,

La Chica de la Luna

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